Concluye la Marcha de las Mujeres

Ayer 29 de noviembre, poco más de las 12 de mediodía, las palabras de las dirigentes del SAT Mari García y Lola Álvarez, ante la Delegación del Gobierno en la Plaza de España de Sevilla, fueron el preludio de la última acción de la Marcha de las Mujeres por la Dignidad. La quema simbólica de las peonadas, con la incineración de cientos de oficios, cerró esta caminata femenina de unos 50 Km.

La Delegada del Gobierno no recibió a una comisión de la Marcha, escondiéndose en “problemas de agenda”, para no atender la solicitud de diálogo; esta excusa fue respondida con un abucheo generalizado.

A esta última etapa, de las tres en la que consistió la Marcha, salió de la Universidad Pablo de Olavide hacia las 10 de la mañana. En el corto trayecto de la misma, el más pequeño de los tramos, y al atravesar las calles sevillanas, se incorporaron más personas, mujeres fundamentalmente, llegando a constituir una potente columna que superaba el kilómetro de longitud, consiguiendo llamar la atención de los problemas de las mujeres jornaleras en su lucha por la supervivencia en las condiciones en las que se desenvuelven en un medio rural, donde la propiedad de la tierra sigue estando en manos de unas pocas familias latifundistas .